Semana Santa

Se tapaban todos los santos de la iglesia y en vez de las campanas el sacristán tocaba las carracas para anunciar la función de la tarde. El día de resurrección se cogían 33 piedricas mientras tocaban la campana de gloria y esas piedras ya estaban bendecidas. Se guardaban en casa y cuando había tormenta se decía “en el nombre de Dios padre, en el nombre de Dios hijo, en el nombre de Dios Espíritu Santo” y se tiraban en contra de las tormentas y rezaban el trisagio. El domingo siguiente de Pascua se celebraba un viático para los enfermos. Iba todo el pueblo con hachas. Ese día era la fiesta de Cuasimodo, solían hacer comida.

Compartir
Código embebido:

secuencias de Celestina Elizalde Casajús